El Itera Cost Optimation Service permite a las empresas optimizar procesos, productos y gestión
ITERA ha desarrollado un sistema propio de trabajo para mejorar la rentabilidad y la optimización de los procesos de sus clientes denominado ICOS: Itera Cost Optimation Service.
El objetivo de este sistema propio es resolver problemas habituales en las empresas como el control de costes y de calidad en los procesos productivos, o controlar la variabilidad de los productos, reducir las incidencias internas y por supuesto, reducir el rechazo de piezas, que merman la competitividad de la empresa.
En este sentido ICOS ayuda a las compañías a mejorar su relación con sus clientes porque reduce disconformidades y optimiza el servicio.
La ventaja de ICOS es que todo este servicio lo hace desde un enfoque de diseño de producto y pone a disposición de las empresas -sea cual sea su tamaño- el equipo de profesionales de ITERA, su conocimiento, experiencia en OEM y Tier 1.
La consecuencia directa es que las emprsas que adoptan el sistema ICOS incrementan su productividad, rentabilidad y la calidad, precisamente porque el sistema incide en toda la cadena de valor e interactúa con el cliente, sus proveedores y su equipo y conforma un único sistema que opera bajo los estándares que marca ICOS.
Este servicio se basa en tres ejes fundamentales:
- Resolver problemas técnicos para sus clientes. Problemas que pueden ser desde un elevado número de piezas no aptas, un tiempo elevado de producción por unidad, problemas de capacidad… Para solventar cualquiera de estos inconvenientes que pueden lastrar la competitividad de una compañía, los ingenieros de ITERA, el 80% de los cuales están certificados en metodología 6 Sixma, analiza y supervisa in situ la situación de la compañía para elaborar un diagnóstico y proponer soluciones. La ventaja competitiva de ITERA radica en que los propios ingenieros y técnicos ejecutan los cambios necesarios en la compañía para conseguir los objetivos.
Esta manera de trabajar viene avalada por los años y la experiencia acumulada por los ingenieros de la compañía y que han desarrollado en los principales OEM y Tier 1 del sector de automoción.
- El segundo eje en el que se mueve ICOS es en el propio producto que desarrolla una compañía. Qué ocurre cuando el producto que una empresa fabrica está mal planteado y su producción es costosa y poco rentable. En este punto, el equipo de ITERA también puede gestionar este cambio de proceso, proponer, implementar y acompañar durante este cambio hasta el momento de la fabricación en serie.
- ITERA también puede acompañar a las empresas en su incremento de competitividad cuando el problema no es ni de producción, ni de concepto de producto, sino cuando se trata de un problema de organización y de gestión de recursos. En este caso, ITERA analiza los diferentes KPI o métricas de la empresa para analizar si, realmente, se pone el foco en aquellos indicadores que efectivamente pueden dar rentabilidad a la empresa. En estos casos, el equipo de ITERA, como en los anteriores, además de realizar un análisis y diagnóstico, acompaña en el cambio de filosofía y de gestión que necesita la empresa.
Esta forma de trabajar conlleva el éxito asegurado para las empresas que confían en ITERA, ya que el acompañamiento y la ejecución del cambio están integrados en el propio proyecto.
Además, desde hace más de 15 años ha sido la manera de trabajar de la compañía en diversas multinacionales y ahora, la empresa abre este conocimiento a todo tipo de perfiles empresariales.
Un paso más:
Con esta metodología, ITERA busca ahora alcanzar a un mayor número de compañías de cualquier tamaño y en cualquier punto del planeta. Para ello, acostumbrados a implantar metodología, han “paquetizado” sus servicios para ponerlos al alcance de empresas de menor tamaño y menos recursos. Ante un sector de la ingeniería y de la industria atomizado y globalizado, desde ITERA proponen la posibilidad de acercar su sistema ICOS a cualquier parte del planeta a través de la digitalización del proceso. En este caso, ITERA cuenta con colaboradores formados en la disciplina de la entidad, pero residentes en las regiones donde hacen falta sus servicios. Este colaborador se encarga de la toma de datos y de la captación de toda la información que, posteriormente, es analizada por el equipo de ingenieros de ITERA.
La ventaja para el cliente es la reducción de costes ya que el técnico que acude a sus instalaciones es residente en la región o país donde se ubica la empresa. Se reducen los costes logísticos. Y, al mismo tiempo, la empresa cliente disfruta de la experiencia y conocimientos del equipo de ITERA. El diagnóstico, la propuesta de mejora y la implantación se ejecutan desde las instalaciones de ITERA con la participación de su colaborador residente que supervisa y acompaña a la empresa en todo el proceso de cambio.